Este ha sido uno de los relatos que más me ha gustado. No lo considero humorístico, me reí mucho con la escena de Roca, y el final también es divertido, pero no el humor no es el tono general de la historia, sino más bien tierno y juvenil, con toques de humor.

Me gusto mucho.
El único problema que encontré es que da la impresión de que la historia se encamina hacia un lugar, y de buenas a primeras como no supo como rematar se hizo un giro y se terminó de otra. Tanto rollo con el cojincito, debería haber terminado con algo relacionado con este. Por ejemplo, encontró un planeta donde la gravedad era mínima y no pesaba nada, no era esponjoso como un cojín, pero se sentía ligero.
